Verdad Escrita. |19|11|2024|
El presidente de Bolivia, Luis Arce, exhortó este lunes a la comunidad internacional, en el marco de la sesión del G20 sobre la lucha contra el hambre y la pobreza, celebrada en Río de Janeiro, Brasil, a impulsar un cambio estructural en los sistemas de producción y consumo para enfrentar la crisis climática y social que afecta al mundo.
Arce destacó que el modelo capitalista actual, basado en el consumo insostenible, está agravando los desastres naturales, como sequías, inundaciones e incendios, los cuales, dijo, aumentan en frecuencia e intensidad, poniendo en peligro la vida en el planeta.
Según el mandatario, esta situación ha llevado a la desaparición de especies, la deforestación, el hambre, la pobreza y el deterioro de la salud pública, afectando especialmente a los países del sur global.
El presidente boliviano enfatizó que las naciones en vías de desarrollo, que representan una gran parte de la población mundial, son las más perjudicadas por la crisis climática y la inseguridad alimentaria.
Por ello, abogó por la necesidad de establecer términos de intercambio más justos, compensar a los países periféricos por sus contribuciones a la mitigación del cambio climático y facilitar el acceso a financiamiento y tecnología bajo principios de cooperación, respeto a las asimetrías y soberanía.
En este contexto, Bolivia expresó su apoyo a la propuesta de Brasil de una Alianza Mundial contra el Hambre y la Pobreza, calificándola como una herramienta clave para movilizar recursos que permitan implementar políticas públicas enfocadas en cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), como erradicar la pobreza y alcanzar la agricultura sostenible.
Arce resaltó la importancia de recuperar y valorar las prácticas ancestrales de los pueblos indígenas, quienes han logrado mantener una relación de equilibrio con la naturaleza.
Asimismo, destacó las políticas redistributivas de ingresos como un mecanismo esencial para reducir desigualdades y combatir la exclusión social.
Bolivia presentó como ejemplo el Sistema de Producción Alimentario basado en la agricultura tradicional, una iniciativa que promueve la producción y distribución liderada por pequeños agricultores, campesinos e indígenas, mediante redes locales de comercialización.
Este sistema, integrado por unidades familiares y comunitarias, garantiza la seguridad alimentaria en armonía con la naturaleza, gestionando de manera sostenible recursos como la tierra, el agua y los bosques.
El mandatario subrayó que el acceso a una alimentación adecuada y suficiente es un derecho humano que los Estados deben garantizar.
El jefe de Estado llamó a los países desarrollados a asumir una responsabilidad moral con las naciones más vulnerables, promoviendo un nuevo orden mundial basado en la multipolaridad y la cooperación solidaria para enfrentar los desafíos globales.
Con este llamado, Bolivia ratificó su compromiso con la Alianza Mundial contra el Hambre y la Pobreza, reafirmando su voluntad de compartir experiencias y participar activamente en la implementación de soluciones que beneficien a los sectores más afectados.
Fuente: AEP Digital/Mac