Verdad Escrita. |3|10|2024|
Argentina le quitó la condición de refugiado al ex presidente de Bolivia, Evo Morales, que le había otorgado el gobierno de Alberto Fernández a fines de 2019. Mediante un comunicado del Ministerio de Justicia, criticaron al expresidente argentino por otorgar el beneficio «indebidamente» y calificó al ex mandatario boliviano como «intento de dictador socialista«.
«Revocamos el estatus de refugiado otorgado al intento de dictador socialista Evo Morales. Este Gobierno de ninguna manera utilizará los recursos de los argentinos para proteger a criminales, terroristas o autoritarios», señaló este miércoles el ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona.
El 12 de diciembre de 2019, poco después de que dejara la presidencia Mauricio Macri, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto le otorgó asilo político a Morales y a cuatro ex miembros de su gobierno. Días más tarde, ya en Argentina, el expresidente boliviano empezó los trámites formales con los que consiguió el estatus definitivo de refugiado.
Casi en simultáneo, el 18 de diciembre, la Fiscalía de Bolivia dictó una orden de detención contra el ex mandatario por los cargos de «sedición» y terrorismo».
Pese a que Morales ya vive en Bolivia desde noviembre de 2020, cuando Alberto Fernández lo acompañó caminando a cruzar la frontera de La Quiaca-Villazón, aún mantenía el status de refugiado en Argentina. «Dicho beneficio fue utilizado indebidamente como herramienta política por el presidente Alberto Fernández, omitiendo el cumplimiento de los requisitos que establece la Ley N° 26.165. Morales llegó a Argentina tras huir de Bolivia en 2019 luego de intentar perpetuarse en el poder mediante un fraude electoral. Fue recibido con privilegios injustificados, pese a las graves acusaciones que pesaban sobre él, entre ellas corrupción, fraude electoral y persecución política de opositores», explicó Cúneo Libarona.
«Desde entonces, ha retomado su liderazgo en la política boliviana, actualmente gobernada por un dirigente de su partido político, y ha viajado libremente a su país de origen. Esto demuestra que no enfrenta los peligros que justifican la protección humanitaria del refugio. El estatus de refugiado es un derecho que debe ser otorgado con seriedad, no como herramienta de conveniencia política», remarcó el ministro de Justicia de Javier Milei.