
Verdad Escrita. |23/05/2025|
En Bolivia se vive una alarmante carencia de combustibles, situación que nuevamente ha ocasionado extensas filas de motorizados en los surtidores de diferentes ciudades del país, cuyos propietarios esperan por horas, e incluso días, para llenar sus tanques.
Las hileras de vehículos se observan desde hace dos semanas, desde el 9 de mayo y tiende a agravarse ante la vigilia y la paralización en la importación de combustible que realizan cisterneros en Santa Cruz que desde el 21 de mayo cumplen un paro de protesta para que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) atienda su pedido de ajustar el precio de fletes.
La dirigencia del sector sostiene que el costo actual del flete no cubre sus gastos operativos, especialmente ante el aumento en los precios de repuestos y servicios, como consecuencia de la falta de dólares.
“El 90% de las empresas de transporte está trabajando normalmente con nosotros y está de acuerdo con las tarifas contratadas”, afirmó en conferencia de prensa el gerente de YPFB Logística, Joel Callaú.
Por otro lado, se informó que la estatal petrolera espera una condición favorable para descargar 149 millones de litros de combustibles de seis buques en la Terminal marítima Sica Sica, administrada por YPFB en el puerto chileno de Arica.
“Tenemos seis buques tanque a la gira: tres naves con 72 millones de litros gasolina, dos buques tanque con 60 millones de litros de diésel oíl y un buque tanque con 17 millones de litros petróleo crudo”, explicó Jhonny Chuquimia, gerente Sectorial de Transporte de Oleoductos de YPFB Transporte S.A.
Asimismo, dijo que la condición del mar es bastante adversa, pues se tiene un registro de 2,1 metros de altura, cuando la operación para atraque que es la aproximación del buque tanque para su amarre en la terminal marítima es de un metro de altura y hasta 1,5 metros durante el desembarque del producto. La previsión que tenemos respecto a las operaciones es que en estos días continuaría la marejada”, explicó.
Los pronósticos estiman que podría haber una ventana para el desembarque entre el 28 y 29 de mayo en función a los registros del comportamiento del mar profundo y su impacto en la costa.
Fuente: El Diario